El año nuevo en España es sinónimo de festival, y de eso WAN sabe bastante. Como cada año nos acercamos a la cubierta de Leganés para bailar el 1 de Enero, y como era de esperar, salimos por la puerta grande… aquí nuestra crónica.
Hace tiempo que en España miles de almas ávidas de un buen día de música, dejamos a un lado los rancios cotillones y fiestas de Noche Vieja para entrar en 2020 bailando con algunos de los mejores nombres de la electrónica mundial. Bueno, eso de los mejores nombres suena muy pretencioso, dejemos en los más conocidos.
Innumerables son los eventos que toman base en nuestro país el 1 de enero, y sin duda uno de los mejores, sin lugar a dudas, es WAN. Aquí dejarme que os de un poquito de caña a los críticos de estos eventos de gran formato. Creernos que sabemos que cuando vamos a un evento de este tipo no vamos a pegarnos el festivalazo de nuestras vidas, ni vamos a presenciar actuaciones dignas de rediseñar la vanguardia electrónica del momento. Pero es un gran día en el que pasarlo bien con viejos y nuevos amigos, bailando con grandes nombres en un espacio donde se intenta cuidar al detalle cada elemento técnico. Por lo tanto, dejar las lecciones de lo que es bueno o no y disfrutar un poco, que no os vendrá nada mal. Dicho esto, entremos en meollo, así vivimos WAN 2020.
Nuestra tarde comenzaría pronto, culpa de ello la tiene un artista al que intentamos seguir siempre que nuestros que haceres nos lo permiten. Hablamos de Raúl Pacheco. Nos agrada ver como cada vez son más los que aprecian y siguen al artista extremeño allá por donde pasa. Sus seguidores son fieles y entregados y es que saben que una sesión de Pacheco, es sinónimo de calidad de principio a fin. En esta ocasión, el set estaría compartido en formato b2b con Anna Tur, pero ambos demostraron una pericia sobresaliente para las horas tan tempranas que los relojes marcaban, dejando la pista en pura ebullición.
Tras Raúl Pacheco y Anna Tur, turno de otro b2b. En esta ocasión firmado por Gonçalo y Sinisa Tamamovic. Como era de esperar el componente de artistas del sello de Paco Osuna, Mindshake, era muy marcado. La fiesta estaba enmarcada en un showcase del label de Osuna, que programaría a sus mas aferramos productores como Fer BR o Sinisa Tamamovic. En este punto quizá hubiéramos disfrutado más de los artistas por separado, pero que le vamos a hacer esto es España y aquí los b2b parecen venir marcados por la falta de tiempo en la confección del line up en lugar de por los motivos que debería. Igualmente, de nuevo un buen set de calentamiento… pues las bombas llegaban ahora.
Y es que a las 22:00 horas, Loco Dice y Paco Osuna hicieron aparición en cabina, y la noche llegó al momento de meter sexta velocidad. Un b2b bien ejecutado, aunque dominado en todo momento por Loco Dice, que parecía coger la cubierta con ganas. Ni junto a Paco Osuno ni posteriormente al hacerse cargo individualmente de la cabina, dio tregua a una cubierta que ansiaba y esperaba esos bombos contundentes y secos con marcados toques urbanos que Loco Dice nos regalaba. Tres horas, (hora y media de b2b y hora y media solo) que se nos hicieron cortas como tres minutos. La noche estaba en su momento álgido y era turno de otro tenor y mariscal de esa delgada línea que separa el techno más pistero del techno-house… Marco Carola.
Tras las últimas veces que habíamos podido bailar con el napolitano, no llevábamos mucha esperanza en Carola, pues últimamente había dormido hasta a las piedras, pero tengo que decir que en WAN para nada fue así. El público pedía fiesta, pedía bass, pedía bailes y Marco Carola se los dio. Subidas y bajadas infinitas, cargadas de efectos y tras las cuales sabias que te espera un bailoteo sin cesar como si fueras acunado por esas líneas de bass que retumban potentes y te llevan de lado a lado. De esas lineas de bass que te dicen que de mayor tus oídos… se resentirán, pero que en ese momento entran como dios, y punto.
La noche tocaba a su fin, y el gusto amargo de lo que se acaba empezaba a instalarse en nuestras mentes. En ese momento, el reloj marcaba las 3:00 y Marco Carola cerraba su set dejando paso al anfitrión de la noche, Paco Osuna. El de Barcelona, miró ciertamente a su pasado dejando de lado algunos momentos más softs, musicalmente hablando, y firmó un set de puro techno -si amigos radicales, techno-. Potencia y groove de la mano en media hora frenética que sin dudas ha sido uno de las mejores sets que un servidor ha disfrutado con Paco Osuna, porque si de algo no hay dudas es que WAN ofrece un escaparate de 10000 personas bailando al unísono y los artistas sacan lo mejor de si mismos.
El cierre de la noche, estuvo a cargo de los alemanes Pan Pot, los cuales elevaron el nivel de bpms dejándonos un techno pistero cargado de groove y muy bailable a la par que potente, sin duda un gran cierre. A mi parecer firmaron un set brillante y que hizo las delicias de los miles de asistentes que aguantaron este año en WAN hasta el ultimo minuto. Y así pusimos fin a la edición 2020 de WAN Festival, con un gran sabor de boca, el cansancio propio de no haber parado de bailar durante casi 12 horas, y la seguridad de que volveremos en su edición 2021.