Por cuarto año consecutivo, tenemos el placer de acercaros lo que Porcuna Electronic Night dio de si. Si queréis un resumen rápido, el éxito parece saberle a poco, y nuevamente vuelven a superar cualquier expectativa previa. Y aunque preciso, la noche del 1 de septiembre tiene mucho más que contar.

No es de extrañar que a muchos sorprenda la buena vitalidad y energía que disfruta el evento que os presentamos. No es para nada común que ayuntamientos y demás ámbitos administrativos pongan de su parte para que un discurso musical llevado a cabo en clave de Techno tenga lugar. En este caso el pueblo de Porcuna puede sentirse afortunado, por partida doble, ya que un pequeño grupo de entusiastas, bajo la asociación Electrónica Utópica trabajan incansables para que, un año más, Porcuna baile Techno.

Como cada año, el evento transcurre en un recinto localizado en el paseo de Porcuna. No eran más de las 11 cuando nos acercamos por sus inmediaciones cuando ya el ambiente nos hacia presagiar que no sería una noche cualquiera. Nos refrescamos durante un rato y comenzamos nuestra expedición.

La encargada de recibirnos sería una de las nuevas joyas de nuestro panorama nacional, Anabel Arroyo. La sevillana viene destacando en cada cabina que pisa y en Porcuna Electronic Night no sería diferente. Techno fino y sin censuras que disparaba perfectamente dispuesto. Momento estelar para un servidor cuando dejó caer el “Eternality Of Soul – Tkivilsaari”.

Llegaron las 1.30 y tocaba el turno de Angel Sonik. Representante ideal del pueblo de Porcuna, tendría una hora y media para golpearnos a base de buen groove. Para esta ocasión tiró de ritmos más duros a los que nos tiene acostumbrados, dejando la pista ideal para el maestro de esta edición.

Si, hablamos de Ken Ishii, todo un sueño hecho realidad. Por primera vez el japonés pisaba tierras jienenses y venía para quedarse, en nuestro recuerdo. Perfectamente de acuerdo a la hora que nos encontrábamos, las 3, comenzó su set bien cargado de graves, de esos que te retuercen por dentro. La pista ya se encontraba bastante bien poblada y el bueno de Ken pudo disponer bien a sus anchas. Haciendo gala de sus precisión en las mezclas y en la selección, evolucionó el set hacia derroteros más duros cargados de bombos y ritmo por doquier. La pista era totalmente suya, no nos hubiera importado que durara toda la noche….

Pero aun quedaba mucha tela por cortar, y es que Industrial Copera estaba perfectamente representada en Porcuna Electronic Night. En primer lugar, Junior, tomando el relevo de Ken Ishii. Cambio drástico en la noche y es que Junior bajó considerablemente el ritmo impuesto por Ken, tirando de ritmos más pausados y melódicos, preparando la pista para el cierre de su compañero Álvaro Sánchez.

Si anteriormente has bailado a Álvaro Sánchez sabes bien que se adapta a la perfección a cada momento de la noche. En esta ocasión no sería diferente, Porcuna quería terminar su evento bailando a lo grande, bailando mucho y Alvaro sabía bien como hacerlo. Ese particular Techno cargado de buen groove se hizo presente para rematar el éxito de su cuarta edición.

Un año más, tanto en ambiente como número de asistentes Porcuna Electronic Night vuelve a superarse. Con un cartel medido a la perfección y una organización que no dejó nada en el aire, así nada puede salir mal. Ya os contaremos que tal su aniversario… ¡Larga vida a Porcuna Electronic Night!