Llegaba el mes de noviembre y, como viene sucediendo en los últimos años, la capital cacereña recibía nuevamente la techno cita Code World Tour. Una cita que estaba enmarcada en rojo para muchos con fecha de este pasado sábado 7 de noviembre, un día que se presentaba con un tiempazo inusual para las fechas en las que nos encontramos, en pleno veranillo de san Martin, como se conoce en la cultura popular, y que nos permitiría gracias a la cálidas temperaturas no cargar con excesivo ropaje ni andar pendientes de si el agua haría acto de presencia, condicionante algo incómodo que acaba por dejarnos siempre que aparece un amargo sabor de boca. Pues bien, a priori, la jornada pintaba estupenda para volver a disfrutar de algo de techno de calidad por nuestra amada tierra.
Artistas de calado internacional como Fatima Hajji, Du’Art, Markantonio, Fernanda Martins bajo su aka enfocado al techno Dot Chandler y la actuación en formato live de Egbert despacharían estas raciones de techno, bien apoyados por los residentes de Code Cesar Almena y Nuke y una avanzadilla de artistas extremeños que harían muy buen oficio desde primera hora de la noche entre los que estaban Raúl Pacheco, Pszko, Junior London, Alberto Rodríguez, Carlos Chaparro, Esteban Arroyo y Pedro Guerrero.
Nuestra llegada a la ciudad se hizo esperar entre unas cosas y otra, sumando a esto la previa que nunca puede faltar, hicimos entrada bajo la carpa cuando los residentes de code desarrollaban su set, una carpa bajo la que ya se encontraba un buen número de asistentes, unas ¾ partes de la capacidad que permitiría ésta. Una última parte de set que nos hacía entrar en faena a buen ritmo con techno bajo en bpms y a un nivel de volumen bajo, pudiendo hablar a la perfección con el de al lado. Eran las 02:30 y tras los dos madrileños tendríamos ante nosotros la primera actuación en Extremadura del holandés Egbert, un Egbert que nos acercaría su personal visión del techno a través de su live, un live que ya ha paseado por los festivales más destacados del continente y los eventos más granados de la isla blanca a lo largo de esta pasada temporada. Hora y media de techno fluido con mucho aplomo que pudimos bailar ya con una carpa casi al 100% de su capacidad. A las 04:00 entraba en escena el italiano Markantonio, artista que nos despacharía la siguiente ración de techno, una primera parte de set que continuo con la senda que su predecesor le había marcado, techno fácil de bailar y digerir, por momentos con falta de grave, para que en cierto momento el de Napoles decidiera coger vuelo directo hacia Berlín con un techno más pesado y oscuro, un tránsito que no llego a desarrollar del todo bien, viéndole en ciertos momentos dubitativo para en una última parte del set dar marcha atrás y volver al mínimal techno.
Poco antes de las 05:30 los monitores derechos del italiano fueron apartados hasta el extremo del escenario, era el momento del siguiente artista, el momento que la inmensa mayoría de los presentes estaba demandando, asomaba su flequillo la salmantina Fatima Hajji y el murmullo del personal se hizo unánime, vítores y aplausos para la dama de hierro del techno patrio, desde la parte de atrás de la carpa pudimos comprobar infinidad de móviles en lo alto intentando captar el inicio del set, era el momento esperado para muchos y así se pudo comprobar, durante la siguiente hora y media la salmantina desplego todo su arsenal de techno frenético, intercalando en más de una ocasión algún tema con corte break que a más de uno descolocaba, durante todo el set como siempre acompañando con su repertorio de gestos de complicidad con el público.
Tras esta y su correspondiente aplauso, llegaría la mejor actuación de la noche, el portugués Duarte Silva conocido artísticamente como DuArt, nos daría un buen repaso a la goma de nuestras zapatillas. Hora y media de techno muy bien servido, a la antigua usanza, mezclas rápidas, exprimiendo a la perfección la mesa, filtros, efectos, pisteos, subidones, un set muy dinámico y vertiginoso que sin darnos respiro nos daría los buenos días con los primeros rayos de sol en sus últimos momentos, un techno y una técnica pinchando que ya pocas veces se puede disfrutar la cual nos hacía recordar los años más puros del techno. El cierre de esta Code World Tour, y ya con la luz del día, estaba reservado para la brasileña Fernanda Martins, que en esta ocasión dejaría de lado su versión más hard para presentarnos a su aka Dot Chandler, lo poco que pudimos escuchar nos dejó buen sabor de boca, un techno mucho más relajado mezclado con mucha personalidad y estilo que nos haría ir relajando y enfriando la maquinaria.
En resumidas cuentas podemos concluir con que nos fuimos más que satisfechos con la jornada de techno que nos habían planteado con esta nueva Code World Tour, aunque podríamos poner un par de pegas, siempre desde la crítica constructiva como es logico. Una, y la más importante sin duda, es que durante gran parte de la noche no terminamos de sentir los graves, muchas de las actuaciones carecían de ese punch en el pecho, parecía como si estuviera apagada la fila de subgraves, abusando por esto en ciertas actuaciones de medios y agudos produciéndonos el maldito pitido en los odios que nos haría la jodienda durante todo el domingo. También pudimos comprobar como entre algunas actuaciones el sonido era más elevado o más bajo en algunos momentos. Y la segunda pega está basada en tener que pagar 5 euros cada vez que uno quería salir para volver a entrar, si es cierto que era una consumición pero es una estrategia que no me parece nada adecuada.
Hacer Comentario
Haz login para poder hacer un comentario